Cómo cultivar y cuidar una Tulipanes

La tulipán llegó a Europa y causó furor en Holanda a partir del año 1634; sus bulbos llegaron a intercambiarse por ganado y por viviendas. Esta especie altamente ornamental no es de cultivo sencillo pero tiene su recompensa, unas espectaculares flores de aroma dulce. Hoy en día, la mayoría de variedades de tulipanes cultivados proceden de esta especie.

El tulipán señora es una planta con un uso ornamental muy popular en el sur de Europa. Esta especie no requiere de inviernos fríos y puede perfectamente naturalizarse en climas mediterráneos. El tulipán señora es de cultivo fácil, en suelos bien drenados y en lugares soleados. Es ideal para cultivar en rocallas dentro del jardín. Un dato curioso es que debe recibir muy poca agua en verano.

De floración tardía, la tulipán de Sprenger, es una bella flor cultivada por lo general en grandes grupos y con fines decorativos. Es ideal tanto para huertos, jardines o interiores. Todavía hoy hay dudas sobre su origen, dividiéndose las opiniones entre Medio Oriente y China. Su popularidad llevó a lo que actualmente se conoce como la “crisis de la tulipomanía”, una gran burbuja económica causada por los tulipanes que tuvo lugar en el siglo XVII.

El tulipa humilis es un miembro de seis pétalos de la familia de los tulipanes que destaca por su coloración, que difiere enormemente según la variación, desde el rosa con centros amarillos (el primero descrito por los botánicos) hasta el blanco con centros azules. Tulipa humilis puede encontrarse a grandes altitudes acercándose a la línea de nieve.

El Tulipán de Creta es un tulipán muy atractivo en jardinería debido a su tamaño y a sus flores bicolores en forma de campana. Estas son de color lila con una mancha amarilla en el centro y se abren formando una estrella cuando están a pleno sol. Se cultiva bien en parterres o arriates.