Culle encarnado es tóxico para gatos y perros, representando riesgos significativos para la salud si se consume. Todas las partes de la planta, incluyendo hojas, flores, frutos, raíces, semillas, tallos, corteza y savia/jugo, son peligrosas. Los síntomas incluyen malestar gastrointestinal y letargo. La atención veterinaria inmediata es crucial para asegurar el mejor resultado.