Acedera proviene de la región mediterránea. Esta planta se clasifica como una maleza debido a sus patrones de crecimiento agresivos y sus detrimentos a otras especies de plantas. En particular, acedera tiene una tasa de crecimiento rápida y puede reproducirse tanto sexualmente, a través de semillas, como vegetativamente, a través de cortes de raíz. Su capacidad para prosperar en varias condiciones de suelo y niveles de luz la hace difícil de controlar. La planta tiene un sistema de raíces fuerte que le permite extraer agua y nutrientes de las plantas vecinas, a menudo causando daño o muerte a las que están cerca. Un individuo acedera puede producir miles de semillas, que pueden permanecer viables en el suelo durante muchos años. Esto contribuye a su carácter invasivo y recurrencias persistentes. El principal medio de propagación de acedera es a través de sus semillas, que se dispersan fácilmente por el viento, el agua y los animales. Las semillas también pueden ser dispersadas involuntariamente por los humanos, por ejemplo, a través de herramientas de jardinería o el suelo.