

Mala hierba rastrera es una maleza resistente y perenne conocida por su resistencia y adaptabilidad a diversas condiciones ambientales. Requiere un mantenimiento mínimo, convirtiéndolo en una planta fácil de cuidar. Puntos especiales de cuidado incluyen garantizar que se implementen medidas de control adecuadas, ya que mala hierba rastrera puede ser invasivo y puede requerir un manejo constante para prevenir una propagación excesiva. La humedad del suelo adecuada también es esencial para su crecimiento, aunque es tolerante a la sequía una vez establecido.
Horario de riego: Todas las semanas
Requisitos de luz solar: A pleno sol
Problemas comunes de Mala hierba rastrera basados en 10 millones de casos reales