

Cómo identificar Amsinckia (Amsinckia)
Amsinckia se caracteriza por cerdas gruesas y similares a pelos que cubren sus tallos y hojas, impartiendo una textura áspera. Esta hierba anual típicamente exhibe un rizado distintivo en la punta de sus tallos florales, que llevan flores en forma de trompeta color amarillo dorado agrupadas estrechamente. La floración normalmente abarca desde principios de primavera hasta el verano. Las hojas de amsinckia son simples, alternas y varían de forma lanceolada a oblongo. Las plantas pueden alcanzar alturas de hasta 3 pies (91 cm), contribuyendo a su presencia llamativa en sus entornos naturales.
Cerdas cubren tallos y hojas, creando una textura áspera para una fácil identificación.
Flores en forma de trompeta de color amarillo dorado forman racimos compactos a lo largo de tallos rizados.
Pequeñas nuececillas de tono gris emergen en la base, mostrando resistencia en tamaño y textura.
Hojas basales, estrechamente oblanceoladas con cerdas y márgenes lisos contribuyen a una apariencia única verde grisácea.
Altura que alcanza hasta 3 pies (91 cm) permite una presencia llamativa en hábitats naturales.
Amsinckia tiene hojas basales que son alternas y estrechamente oblanceoladas, caracterizadas por su color verde grisáceo. Las hojas miden típicamente entre 2-4 pulgadas (5-10 cm) de largo. Sus márgenes son enteros, es decir, lisos y no lobulados. Una característica distintiva es la presencia de cerdas que cubren las hojas, dándoles una textura áspera. Las venas no son particularmente prominentes, y las hojas tienen una sensación gruesa y algo coriácea debido a la abundante cobertura de cerdas.
Las flores de amsinckia se distinguen por su tono amarillo dorado oscuro a naranja, formando formas de embudo con cinco pétalos. Están dispuestas en una espiga curvada única, similar a un escorpión, que varía de 2 a 15 pulgadas (5 a 38 cm) de largo. Cada flor presenta brácteas con hojas en la base y florecen constantemente durante la primavera y el verano.
Los frutos de amsinckia se distinguen por su tamaño diminuto con características únicas que ayudan en su identificación. Estos frutos se manifiestan como nuececillas basales que emergen en la base de la planta. Poseen un tono gris distintivo, lo que contribuye a su reconocimiento. Las nuececillas tienen una textura sutil y, aunque son diminutas, son notablemente resistentes. Cada nuececilla es pequeña, definiendo aún más las características identificativas del fruto de esta especie.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.
Clasificación científica de Amsinckia