

Cómo identificar Clemátides (Clematis)
Clemátides , también conocida como Pimenteros
Clemátides se caracteriza por su naturaleza robusta, leñosa y perenne. Esta densa enredadera típicamente exhibe longitudes que varían de 6 a 18 pies (1.8 a 5.5 metros), con algunas formas adaptadas a trepar mientras que otras muestran un hábito de expansión. Clemátides tiene un follaje que es caducifolio en algunas especies y perenne en otras, lo que agrega a la diversidad dentro del género. Los tallos son notablemente delgados, a veces dando la impresión de fragilidad. La significativa variabilidad de la planta y la multitud de cultivares contribuyen a una vasta gama de usos ornamentales.
Hojas alternas, pinnadamente divididas con bordes serrados.
Flores con 4-8 pétalos coloridos y superpuestos, formando una forma de estrella.
Cola sedosa-plumosa en el fruto aquenio seco para dispersión por el viento.
Enredadera robusta con longitudes de 6 a 18 pies (1.8 a 5.5 metros).
Estallido central de numerosos estambres en las flores fragantes, floreciendo desde finales de la primavera hasta principios del otoño.
Las hojas de clemátides están dispuestas de manera alterna, pinnadas y divididas en múltiples folíolos. Cada folíolo es de forma ovada a lanceolada, típicamente midiendo de 2 a 4 pulgadas (5-10 cm) de largo y de 1 a 2 pulgadas (2.5-5 cm) de ancho. El color de la hoja varía de verde oscuro a un verde más claro en el envés, y la textura es suave. Las venas son pinnadas, corriendo paralelas a los márgenes de la hoja, proporcionando soporte estructural. Cada segmento de la hoja muestra un borde serrado, realzando la textura general.
Las flores de clemátides se caracterizan por tener de 4 a 8 partes similares a pétalos, que pueden variar en color desde blanco, rosa, púrpura, azul hasta rojo. Cada flor mide aproximadamente 3 pulgadas (8 cm) de diámetro. Los pétalos a menudo están ligeramente superpuestos, formando una forma de estrella. Un estallido central de numerosos estambres proporciona una textura contrastante. Estas flores emiten una fragancia ligera y dulce, y típicamente florecen desde finales de la primavera hasta principios del otoño, creando una exhibición vibrante y llamativa.
El fruto de clemátides consiste en una serie de pequeños aquenios secos. Cada aquenio individual está marcado por una distintiva cola sedosa-plumosa, que aparece como un apéndice plumoso, otorgando una textura esponjosa a los frutos colectivos. Estas colas son visualmente llamativas y pueden ser de varios centímetros de largo, lo que facilita la dispersión por el viento. El fruto en sí es típicamente de color marrón y, al madurar, crea una exhibición caprichosa similar a un pincel. La combinación del aquenio seco y las colas ornamentales es característica de clemátides, proporcionando una estética única entre los frutos.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.
Clasificación científica de Clemátides