

Cómo identificar Venus atrapamoscas (Dionaea muscipula)
Venus atrapamoscas exhibe una apariencia llamativa y distintiva, caracterizada por hojas articuladas y en forma de mandíbula, bordeadas con proyecciones largas como pestañas. Esta notable adaptación cumple una función en la dieta carnívora única de la planta. Cada hoja tiene dos lóbulos que forman una trampa capaz de cerrarse rápidamente cuando se activa. Las superficies internas de estos lóbulos son de color brillante, mostrando a menudo un tono rojo o rosa vivo, que contrasta fuertemente con el verde del resto de la hoja. Generalmente crece en racimos, esta planta alcanza un tamaño modesto, generalmente no excede las 6 pulgadas (15 cm) de altura y extensión.
Hojas lobuladas con proyecciones como pestañas, capaces de cerrarse rápidamente para atrapar presas.
Superficies internas de las hojas de colores brillantes, a menudo rojas o rosas, contrastando con el exterior verde.
Flores blancas en forma de copa con 5 sépalos, 5 pétalos y 10-12 estambres en mayo-junio.
Cápsulas dehiscentes, de color verde a marrón, con pequeñas semillas negras, que se abren a lo largo de tres suturas.
Roseta de hojas espinosas de crecimiento bajo que terminan en estructuras de trampas articuladas, de hasta 5 pulgadas de largo.
Las hojas de venus atrapamoscas miden 2-5 pulgadas (5-13 cm) de largo y forman una roseta basal de crecimiento bajo de hasta 8 hojas espinosas. Cada hoja termina en una trampa compuesta por dos lóbulos articulados con bordes espinosos. La superficie interna de la trampa varía de rojo oscuro rico a verde, influida por la exposición a la luz solar. Estas hojas modificadas atrapan insectos, utilizando néctar para atraerlos al interior. Las características clave incluyen la textura espinosa y la estructura de lóbulos articulados.
Las flores de venus atrapamoscas aparecen en racimos en la parte superior de un tallo sin hojas de 4-12 pulgadas (10-30 cm) en mayo y junio. Cada flor de 0.7 pulgadas (1.8 cm) es blanca y en forma de copa, con 5 sépalos, 5 pétalos y 10-12 estambres. Esta configuración, combinada con el período de floración distintivo, ayuda a identificar la especie.
El fruto de venus atrapamoscas es una cápsula dehiscente, que generalmente contiene un número modesto de semillas. Cuando maduran, estas cápsulas son de color verde a marrón, proporcionando camuflaje entre el follaje circundante. Cuando están listas, se abren a lo largo de tres suturas para liberar las semillas para su dispersión. Cada semilla es diminuta y negra, ofreciendo un fuerte contraste con su cápsula. En promedio, las cápsulas tienen aproximadamente 0.2 pulgadas (5 mm) de diámetro, un tamaño relativamente pequeño que refleja la naturaleza minimalista del hábito frutal de venus atrapamoscas.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.
Clasificación científica de Venus atrapamoscas