

Cómo identificar Lobelia azulada (Lobelia erinus)
Lobelia azulada , también conocida como Lobelia azul
Lobelia azulada se caracteriza por sus vibrantes y diversas flores, incluyendo azul oscuro, azul suave, rojo carmín con un ojo blanco e incluso flores completamente blancas. Las plantas individuales suelen alcanzar una altura de 10 a 15 cm. Algunos cultivares exhiben un follaje distintivamente verde-bronce, mientras que otros presentan formas colgantes, alcanzando longitudes adecuadas para cestas colgantes. Las flores tienen una morfología notable con cinco lóbulos. Para mantener su despliegue de color, lobelia azulada se beneficia de una poda después de cada ciclo de floración para promover más florecimiento.
Flores de color azul índigo con garganta blanca, tubulares, de 5 partes, de forma irregular, de 2,5 cm.
Follaje distintivo verde-bronce y formas colgantes, alcanzando una altura de 10 a 15 cm.
Pequeña cápsula dehiscente de <1,27 cm, tono marrón. Las semillas tienen una textura fina como polvo.
Hojas sin peciolos, hojas inferiores obovadas, hojas superiores lineares. Verde brillante con bordes serrados.
Flores con 5 lóbulos, de color azul oscuro, azul suave, rojo carmín o blanco puro.
Lobelia azulada presenta hojas prácticamente sin peciolos. Las hojas inferiores son obovadas, generalmente incisas y pueden medir alrededor de 2,5-5 cm de largo. Las hojas superiores son lineares, serradas y generalmente miden aproximadamente 1,3-2,5 cm de longitud. Estas hojas son de un verde brillante con una textura suave y un patrón de venación simple. Las formas y patrones de serrado distintos hacen que las hojas sean identificables, complementando su atractivo estético.
Lobelia azulada produce flores llamativas de color azul índigo o azul púrpura con una garganta blanca. Cada flor es tubular, de 5 partes y de forma irregular con dos labios. La flor tiene cinco pétalos; los tres pétalos inferiores son más grandes y anchos, mientras que los dos pétalos superiores son estrechos, puntiagudos y están juntos. Suelen alcanzar aproximadamente 2,5 cm de tamaño. Estas flores florecen profusamente y son más prominentes durante los meses de primavera y verano.
El fruto de lobelia azulada es una pequeña cápsula dehiscente, típicamente de menos de 1,27 cm de longitud. No es particularmente ornamental y a menudo está oculto bajo el dosel del follaje. Al madurar, la cápsula se abre, revelando numerosas semillas diminutas. El color del fruto maduro es un tono marrón, que se mezcla con la paleta de colores general de la planta. Las semillas dentro tienen una textura extremadamente fina, casi como polvo, reflejando la naturaleza discreta del fruto.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.
Clasificación científica de Lobelia azulada