

Cómo identificar Penstemon cobaea (Penstemon cobaea)
Penstemon cobaea exhibe una presencia llamativa con su racimo de grandes flores en forma de campana, que a menudo son de un tono vivo de púrpura o violeta. Las flores se sostienen en tallos erguidos que alcanzan hasta 2 pies (60 cm) de altura. Su follaje está compuesto por hojas gruesas y lanceoladas que son predominantemente basales. Estas hojas pueden añadir un verde frondoso a la base, contrastando agradablemente con las flores llamativas. Penstemon cobaea es especialmente conocido por su relación con abejas especializadas como Osmia (Melanosmia) distincta, que se sienten atraídas por su néctar y polen.
Flores en forma de campana de un púrpura vibrante, hasta 2 pies (60 cm) de altura.
Grandes flores tubulares con patrones de venas intrincados, 1.5 a 2 pulgadas (3.8 a 5 cm) de largo.
Hojas suaves, vellosas, ampliamente ovadas, de 6-8 pulgadas (15-20 cm) de largo, abrazando el tallo.
Las hojas de penstemon cobaea son notablemente grandes, midiendo típicamente alrededor de 6-8 pulgadas (15-20 cm) de largo. Son vellosas con una textura suave y peluda, y tienden a abrazar el tallo. Las hojas son de forma ovada a oblonga y su color es generalmente de un verde medio vibrante. Las venas son prominentes, creando una superficie ligeramente acanalada. Estas hojas también son conocidas por su naturaleza abrazadora, lo que significa que envuelven parcialmente el tallo, convirtiéndose en una característica clave de identificación para penstemon cobaea.
Las flores de penstemon cobaea muestran impresionantes tonos que van desde el blanco hasta el púrpura intenso. Cada flor es tubular y en forma de campana, midiendo aproximadamente 1.5 a 2 pulgadas (3.8 a 5 cm) de largo. Tienen cinco pétalos dispuestos en un patrón simétrico con una ligera expansión en la boca. Las flores suelen florecer a finales de la primavera o principios del verano, emitiendo una fragancia suave y dulce. Los intrincados patrones de venas en los pétalos añaden a su belleza delicada, haciendo que las flores de penstemon cobaea sean una vista encantadora.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.
Clasificación científica de Penstemon cobaea