

Cómo identificar Pinus aristata (Pinus aristata)
Pinus aristata se distingue por su hábito de crecimiento compacto e irregular, formando una extensión redonda o plana a medida que envejece. El tronco de pinus aristata es notablemente cónico con una considerable torsión, alcanzando hasta 3 pies (unos 91 cm) de diámetro. Un rasgo llamativo de pinus aristata son sus agujas azul-verde que exudan un aroma distintivo, cada una recubierta de una sustancia resinosa que se puede sentir al manipularlas.
Crecimiento compacto e irregular formando una forma redonda o plana.
Agujas de color verde azulado con revestimiento resinoso y aroma distintivo.
Las flores femeninas se desarrollan en conos leñosos, de color rojo púrpura.
Conos duros y erizados con color marrón claro y escamas acorazadas.
Agujas de color verde azulado en haces de cinco, con puntos blancos de resina.
Las hojas de pinus aristata se distinguen por sus agujas de color verde azulado, cada una mide entre 1 y 1.7 pulgadas (2.5 a 4.3 cm) de longitud. Estas agujas están organizadas en haces de cinco y frecuentemente presentan puntos blancos de resina. Poseen una forma delgada y alargada y exhiben una textura suave pero ligeramente rígida. La presencia de puntos blancos de resina es una característica única, lo que hace que las hojas sean un rasgo clave de identificación para pinus aristata.
Las flores de pinus aristata son pequeñas y discretas, típicamente aparecen entre finales de primavera y principios de verano. Carecen de pétalos vibrantes, siendo más funcionales que decorativas. Las flores masculinas se forman en racimos, típicamente amarillentos y de 1-2 pulgadas (2.5-5 cm) de longitud. Las flores femeninas son de color rojo-púrpura y se desarrollan en conos leñosos. Estos conos miden aproximadamente 3-4 pulgadas (7.5-10 cm) de largo cuando están maduros. Las flores no tienen un aroma notable, concentrando su energía en la producción de semillas en lugar de la atracción visual.
El fruto de pinus aristata es botánicamente conocido como cono, caracterizado por una textura leñosa y resistente. Estos conos, típicamente de 1.5 a 3 pulgadas (4-8 cm) de longitud, poseen una apariencia distintiva erizada. Cada cono comprende escamas dispuestas de manera compacta que protegen las semillas en su interior. Cuando maduran, los conos muestran un tono marrón claro, y las escamas blindadas pueden abrirse ligeramente, ayudando en la dispersión de las semillas. El aspecto general discreto y espinoso del fruto es una característica notable para la identificación.
El gardenia es una planta a menudo cultivada como ornamental, pero que también ha recibido un rol en la producción de tintes, pues sus frutos contienen crocetina, un compuesto utilizado para fabricar el color amarillo azafrán. Por su larga historia de cultivo en ese país, es frecuente hallarlo representado en pinturas y poemas chinos.
El potos es una planta resistente que requiere pocos cuidados, por lo que su cultivo ornamental está tan extendido. Increíblemente, esta planta trepadora puede alcanzar los 20 m de altura. Su floración natural es extremadamente rara. La última de la que se tiene constancia fue en 1964 en Singapur.
La tomate es una planta que produce como fruto el tomate. El fruto es comestible y se usaba ya en la antigüedad, en el tiempo de los aztecas. Cuando llegó al continente europeo en el siglo XVI, se creyó en un inicio que era una planta tóxica, por eso se usaba tan solo como planta ornamental.
El chile es una planta herbácea que fue llevada a Europa por los exploradores de la época. Se cultiva principalmente en huertos por su fruto alargado comestible llamado pimiento. Existen numerosas variedades que se diferencian en el color, desde verde hasta rojo, y en el sabor, que va de dulce a picante. El pimiento es apreciado en la cocina del mundo entero.
La monstera deliciosa es una de las plantas decorativas tropicales más populares gracias a la interesante forma de sus grandes hojas. Sus curiosas flores solo brotan cuando se cultiva en exteriores. Luego, dan paso a un fruto que asombrosamente puede tardar hasta un año en madurar. Sus raíces son fuertes y sirven para hacer cestas.
El curioso epíteto macrophylla hace referencia a las grandes hojas de la hortensia. Sin embargo, son sus imponentes flores lo que la han hecho ganar el aprecio de los amantes de la jardinería. Sorprendentemente, dependiendo del suelo varía el color de las flores, los suelos ácidos producen flores azules y los alcalinos flores rosas.