El olmo de Siberia es el típico árbol que adorna las calles de cualquier ciudad de España. A diferencia de otros miembros de la familia de los Olmos, el olmo de Siberia no es demasiado longevo, pero sí muy invasivo, pues tiene una raíz potentísima que lo hace resistente a podas, talas y pisoteos. La madera del olmo de Siberia suele ser aprovechada como leña.